Querida Creadora Escénica:

Me hace muy feliz conocerte y platicar por este medio, la comunidad escénica parecería un universo enorme, pero tiende a ser más pequeño de lo que pensamos, aunque para mí ha sido difícil encontrar otras formas de conectar con Creadoras. Como ya sabes, tengo más de una jornada de trabajo, entonces mi recorrido en Guanajuato es muy acotado, los lugares a los que voy son a cierta hora, con ciertas personas y de regreso a casa. El mundo digital me ha dado más oportunidades de conectar que la ciudad a través de la palabra.

La comunidad escénica termina al salir de la Universidad. Afuera estamos un poco a la deriva, se espera que algún maestro haya encontrado tu perfil interesante para alguna propuesta y de ahí vas escalando.

Habemos muchos peces perdidos que no fuimos seleccionados así, hemos ido cavando en la tierra para nuestro río, desde nuestra trinchera.

En mi caso escribir.

Escribo mucho de la ciudad, amo mucho escribir, en los últimos años me ha acompañado en procesos de duelo y con los meses encontré muchos GoogleDocs sin terminar, muchas “grandes ideas” inconclusas. *Llega el monstruo de la productividad/capitalismo con apetito insaciable*. Es ahí donde me reprochaba el estar gastando mi tiempo empezando cosas nuevas, dejando otras a medias; la verdad, sigo batallando con esto. Soy mi propio vigilante de calidad. Si has estado ahí, me gustaría decirte que las cosas “no terminadas” merecen ser mostradas, tus procesos merecen ser compartidos, crea el espacio seguro donde muestres tu arte/vida en proceso. Habemos muchas personas con ganas de escuchar los caminos de más Creadoras, de colaborar, quizás coincidimos en búsquedas o en desacuerdos estructurales.

Hay una canción que escribió un grupo de amigas para la obra de “VULVA. El proyecto”, es una canción con recopilación de cartas que escribieron chicas del proyecto y dice “El mundo ya es muy duro, no seas hostil contigo”.

Ojalá las charlas por carta sigan.